Turismo de Andalucía es la entidad que, a través de los Planes Directores de Promoción Turística y de los Planes de Acción anuales, realiza la promoción turística de Andalucía.
De este modo ejecuta múltiples iniciativas y acciones promocionales tendentes a trasladar de manera adecuada los valores y atributos de la marca y posicionarla en los diferentes mercados; utilizando para ello las más modernas tácticas y técnicas, así como las últimas tecnologías.
Andalucía, líder en turismo, tiene en sus campañas de publicidad una de sus grandes cartas de presentación ante el mundo. A lo largo de los últimos años, las acciones publicitarias y de comunicación de Andalucía han cumplido con creces los objetivos previstos, al punto que las mismas han sido puestas como ejemplo de gestión de marca e implementación y puesta en valor de los beneficios y atributos de Andalucía como destino turístico.
En torno a las campañas de publicidad gravita de manera absoluta el conjunto de la acción, de manera que su mensaje y creatividad afecta de lleno a la totalidad de las estrategias planteadas tanto en el Plan Director de Promoción Turística 2013-2016, recientemente aprobado y presentado, como en el Plan de Acción anual de la Empresa.
Todas las campañas deben ser entendidas por tanto como un reto y un desafío, en el convencimiento de que se tratan proyectos fundamentales para Turismo Andaluz y, por extensión, para Andalucía, por cuánto del éxito y aceptación de las misma dependerá en cierta medida de la visión de la Comunidad Autónoma en el mundo, su posicionamiento como destino líder y la consecución de los resultados previstos.
Con todo ello, y por norma general, las campañas propuestas deben responder a los principios de modernidad, universalidad, diversidad, equilibrio, profesionalidad, sostenibilidad y rentabilidad.
Modernidad en el sentido de presentar una Comunidad vanguardista, con recursos de primer nivel en todos los ámbitos, alejada de los tópicos que en nada le han ayudado, con líderes de opinión en todos los campos sociales, pionera en diversos sectores de actividad y más aún en turismo, y solidaria.
Según el balance turístico del ejercicio 2012, Andalucía recibe en similares porcentajes tanto turismo nacional como internacional. Por tanto, las campañas debe ser universales, válidas para la totalidad del público objetivo al que se dirige independientemente de su país o sus características sociales y culturales, utilizando para ello un lenguaje sencillo y reconocible y respetando los valores y símbolos propios de cada uno de los países en los que se implemente.
Asimismo, la propuesta creativa deberá reflejar de manera adecuada la diversidad de Andalucía y la calidad de todos los productos turísticos que la conforman. Andalucía tiene de todo y para todos.
Equilibrio por cuanto debe recoger de manera adecuada y siempre bajo los parámetros generales que sustentan la marca Andalucía, la riqueza y posibilidades de las ocho provincias de Andalucía, de manera que todas ellas y sus habitantes se vean reflejados de alguna manera en la creatividad de la campaña. Más allá de la repercusión nacional e internacional, el éxito de la campaña dependerá en buena medida de la aceptación obtenida entre la población andaluza por cuanto ello supone en la difusión de la misma si supone un motivo de orgullo para el propio andaluz.
El turismo en Andalucía lo hace fuerte todos y cada uno de los que participan y lo construyen día a día. Por tanto, la campaña debe prestar especial atención a reflejar de manera adecuada la calidad y profesionalidad de los recursos humanos que forman parte de la industria turística (empresarios y profesionales del sector en lo público y en lo privado). Y en otro nivel, no menos importante, otros grupos de interés que de manera directa e indirecta también contribuyen a enriquecer el turismo en Andalucía tales como los medios de comunicación y la población andaluza en general.
La campaña deberá ser sostenible tanto en lo que se refiere a su perdurabilidad en el tiempo como en su respeto por el medio ambiente, de manera que pueda mantenerse sin perder actualidad un mínimo de tres ejercicios anuales a contar desde la fecha de presentación de la misma y transmita de manera adecuada la planificación ordenada del turismo en Andalucía y la sostenibilidad de la industria turística.
Y por último, la campaña deberá ser rentable. Esto es, deberá conseguir el objetivo fundamental para el que está concebido, que no es otro que la captación de turistas nacionales e internacionales. Para ello, y en la propuesta, la empresa licitante deberá incluir herramientas e indicadores mediante los cuales, y más allá de la ejecución de la campaña en medios, pudiera medirse la eficacia y rentabilidad de la misma.